Es muy importante para nosotros dar un trato justo a la gente. Los ingenieros agrónomos de SanLucar visitan regularmente a nuestros socios para convencerse in situ de que nuestras estrictas directrices también se cumplen en el puesto de trabajo. Con nuestro programa DREAMS estamos involucrados en la educación, la nutrición, el deporte y la protección del medio ambiente en los países en los que tenemos plantaciones.
En nuestra finca de Rooihoogte viven y trabajan 200 personas. Allí, por ejemplo, hemos creado un jardín de permacultura para que sean autosuficientes, todo el mundo tiene acceso a una sala de fitness y hay un programa de antialcoholismo. Con la generosa donación de la asociación de apoyo Förderverein compramos un autobús para los habitantes de la finca y así pueden ir al siguiente pueblo para hacer sus recados fácilmente- La educación de los niños también es muy importante para nosotros. Los pequeños asisten a nuestra guardería gratuita y a los más mayores se les ofrecen clases particulares y becas escolares. Porque la educación es la clave para una vida independiente.
En Túnez abrimos las puertas a las personas con discapacidades mentales o físicas. Apoyamos y trabajamos conjuntamente con organizaciones como AGIM (Asociación de Personas con Deficiencias Motoras, en español) o UTAIM (Unión Tunecina de Apoyo a los Discapacitados Mentales, en español), que integran a las personas con discapacidades en el mundo del trabajo. También participamos en el programa estatal «Las empresas como socias de las escuelas». Lo que significa que renovamos las escuelas, restauramos los patios de las escuelas y financiamos los materiales para el aprendizaje. Así, al proporcionar un mejor entorno de aprendizaje para alumnos y profesores, estamos invirtiendo en el futuro del país.
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