En estos días, todos prestamos especial atención a un órgano: nuestros pulmones. Cada día filtra unos 12.000 litros de aire, compuesto de un 78% de nitrógeno y un 21% de oxígeno. ¡Qué capacidad de trabajo tiene este órgano vital!
Se asegura de que nuestras células reciban suficiente oxígeno. Para mantenerlo así, hemos hecho algunas investigaciones para saber qué alimentos mantienen los pulmones en forma.
Investigadores de la Universidad Johns Hopkins de los Estados Unidos han descubierto que la función pulmonar de los ex fumadores se recupera mejor si comen una manzana y al menos dos tomates al día. Esto también ralentizaría de forma apreciable una disminución de la función pulmonar relacionada con la edad.
Un estudio sobre los pulmones (Encuesta sobre la Salud Respiratoria de la Comunidad Europea) realizado por científicos europeos, ha llegado a una conclusión muy similar. En este estudio de diez años de duración, 680 adultos de Noruega, Gran Bretaña y Alemania fueron preguntados sobre sus hábitos alimenticios. Cuanta más fruta y especialmente tomates comían, más lento era el deterioro de la función pulmonar.
Los autores del estudio sospechan que en particular el licopeno, antioxidante presente en los tomates, ayuda a contrarrestar el deterioro de la función pulmonar.
Brócoli.
Los científicos de la Universidad Johns Hopkins también descubrieron que la sustancia vegetal secundaria sulforafano, contenida en el brócoli, puede reactivar nuevamente un determinado gen en los fumadores. Este gen protege las células y, por supuesto, también protege a las células de los pulmones de los contaminantes y de las toxinas.
Jengibre y cebollas.
El jengibre y las cebollas también son buenos para los pulmones, especialmente cuando se está resfriado. Tienen efectos antiinflamatorios y antibacterianos. Y los aceites esenciales que contienen también ayudan a disolver la mucosidad de los bronquios y los pulmones.
Para disfrutar de un delicioso té de jengibre, lave bien el tubérculo y corte parte de él en pequeñas rebanadas, vierta agua caliente sobre ellas y déjelas en remojo durante al menos 5 minutos. Y luego endulce con miel a su gusto.
Fortalecer nuestros pulmones no es nada difícil y además sabe muy bien: consumir mucha fruta y verdura fresca nos beneficia enormemente. Porque contienen muchos antioxidantes que protegen a las células de las toxinas y de las sustancias dañinas. Y, muy importante: ¡ejercicio regular al aire libre, y luego inspirar y expirar profundamente!
Fuentes: fitbook.de, lungeninformationsdienst.de, brigitte.de, focus.de, netdoktor.at (Alemán)
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