Giuliano Puglia Fruit.
Hace más de 60 años, el “abuelo“ Antonio Giuliano empezó a cultivar uvas en Bari, en el sur de Italia. Actualmente ya es la tercera generación —compuesta por los hermanos Vito, Gianni y Nicola— la que dirige esta empresa familiar, guiándola a través de los altibajos del cultivo de esta fruta y convirtiéndola en referente por sus uvas especiales. Llevamos más de 20 años siendo colaboradores. Sobre todo Vito cultiva variedades exclusivas, incluso variedades del pasado que han sido redescubiertas. Con su incomparable saber hacer, esta familia nos ayuda a mejorar nuestros cultivos de uva en Sudáfrica, Túnez o Ecuador. Y no solo eso: la familia Giuliano también se ocupa de la reforestación de una enorme reserva natural con árboles y plantas autóctonas para que no se pierdan el paisaje típico y la diversidad de la fauna de la zona.
Más sobre sus especialidades y su compromiso social y medioambiental.
Antonio Llusar y CIA.
Nuestros colaboradores desde el principio: los hermanos Llusar, con sus excepcionales naranjas y clementinas. Esta familia destaca por el exquisito cuidado que dispensa a su fruta, tanto en el cultivo como en la cosecha e incluso después. Las frutas pasan por nada menos que 4 procesos de selección antes de su comercialización, para que ningún golpe o defecto en la piel perjudique su sabor. A lo largo de nuestros muchos años de colaboración no solo hemos crecido juntos, sino que también hemos perfeccionado nuestro requisito de ofrecer el mejor sabor, siempre en armonía con las personas y la naturaleza. En Sudáfrica llevamos la gestión conjunta de las fincas de Rooihoogte y Middlerivier.
Frutas Poveda.
¿Por qué la familia Poveda lleva tantos años siendo nuestro colaborador? Porque tres cosas son las que cuentan para ellos: sabor, sabor y sabor. Esta familia lleva generaciones cultivando fruta de hueso y limones en la soleada Murcia. Utilizan conocimientos de toda la vida sobre las mejores variedades (que a veces maduran en el árbol empaquetadas en bolsas de papel) así como logros modernos, como, por ejemplo, el riego por goteo, con el que se evita malgastar recursos. Gracias a su experimentado cultivo en armonía con las personas y la naturaleza no solo consiguen un sabor magnífico para sus frutas de hueso, sino que también han conseguido que la piel de los limones sea comestible.
Fresaflor.
Sin Fresaflor, SanLucar no sería SanLucar. Desde sus inicios, la cooperativa Fresaflor son colaboradores agricultores en el cultivo de las fresas, frambuesas y arándanos de los que todo el mundo habla. En la provincia andaluza de Huelva los frutos crecen en mesas altas, para que el consumo de agua y minerales pueda ser controlado con precisión. Además, gracias a los invernaderos túnel, las plantas están protegidas de la lluvia y el viento, hay un programa para preservar las abejas y campos de ensayo en los que se investigan nuevas variedades de bayas.
Danny Lohse.
¿Cómo se consiguen unos arándanos tan dulces y deliciosos? Con pasión y mucha experiencia. Como desde hace 42 años, la segunda generación de los Lohse sigue plantando estas bayas redondeadas y de fresco aroma deliciosamente dulce. Su plantación de 55 hectáreas se encuentra en la pintoresca localidad de Südheide, en Baja Sajonia (Alemania), con suelos sueltos que resultan perfectos para los arándanos. Estos pequeños frutos se sienten aquí como en casa. Los Lohse han dispuesto además otras hileras de flores para las abejas y demás insectos. Gracias a ellos, desde 2012 disfrutamos cada año de una excelente y deliciosa cosecha de arándanos de Baja Sajonia.
La familia Hensen.
En 1966, cuando los padres de Ralf Hensen fundaron una sencilla explotación para frutas de hueso y pepitas en Swisttal (Alemania), pocos pensaron que algún día cultivarían algo más que unas pocas bayas. Hoy, sus dulces frutos rojos son famosos por su delicioso sabor, incluso en el extranjero. Ninguna variedad tiene el mismo sabor durante todo el año. Por eso, los Hensen buscan siempre aquellas variedades que ofrezcan el mejor sabor en cada estación. Para que cada fruta crezca de forma óptima en cada época del año, cultivan sus bayas no solo en el exterior, sino también en túneles que las protegen del frío y la lluvia. Desde 1999, son una parte importante de SanLucar Deutschland.
La familia Münkel.
Desde 2005 recolectan para SanLucar dulces arándanos jugosos, crujientes y de intenso aroma, que cultivan en una soleada meseta de Baja Franconia (Alemania), cerca del Meno. Allí ponen toda su pasión en el cuidado de sus frutos y su plantación. Eso significa un año de podando, regando, cuidando, quitando malas hierbas y colocando colmenas, porque solo con la ayuda de estos laboriosos insectos puede la familia Münkel cosechar para nosotros sus arándanos maduros de junio a septiembre. Por cierto, Jochen Münkel las llama «bolas de doping», por la enorme cantidad de nutrientes que contienen.
La familia Hensen.
Cuando hablamos de frutas exóticas y deliciosas, Satori es simplemente insuperable.. Desde su fundación en 1986, la empresa se ha dedicado a cultivar la mejor fruta. Nuestros deliciosos mangos y aguacates perfectamente maduros impresionan por su maravilloso aroma y su intenso sabor. Para que sepan tan bien, los cosechamos en el momento exacto con la ayuda de décadas de experiencia y dejamos que maduren en condiciones tropicales. Así se mantienen frescos durante más tiempo y desarrollan todo su sabor en el momento de la compra.